¿Cuál es el rol del papá en la etapa de lactancia?

Antes del nacimiento de su primera hija un amigo muy querido me contaba apenado lo que pensaba. “Cuando nazca mi Sofía ¿qué papel cumpliré?... dicen que los bebés están todo el día pegados a la mamá por eso de la teta y la lactancia”.

Amamantar es lo único que la mamá puede hacer a diferencia del papá. Sin embargo, para que la madre cumpla ese rol tan importante, necesita del apoyo no solo físico sino emocional del padre.

Durante las primeras semanas de lactancia, es muy natural que la mamá se agote y si a esto se suma los problemas que se puedan dar producidos por el mal agarre del bebé, los dolores en los pechos o la espalda por una mala posición; es aquí donde papá nos ayudará, su rol es fundamental en el éxito de la lactancia.

Una mamá que cuenta con el apoyo de un papá que le da estabilidad, ánimo, tranquilidad, confianza, seguridad, es una madre que se siente respaldada y fortalecida para continuar con su amamantamiento. El padre será compañero y defensor de la madre ante comentarios que no ayudan en el acto de dar de mamar, así como un celoso “guardián” de las excesivas visitas al hogar, garantizando de esta manera la tranquilidad y descanso de la madre y el bebé durante los primeros días.

Pero ¿qué puede hacer el papá durante el periodo de lactancia para no sentirse desplazado por no participar en la alimentación de su hijo? ¡Mucho! Entre otras cosas, el padre puede responsabilizarse de la organización de las tareas de la casa, un gran reto, que seguramente realizará con gusto, si dialogamos con él.

¿Pero eso es todo? ¡Por supuesto que no! Valoremos la presencia de nuestro compañero, la ternura innata en cada hombre y claro, su fuerza.

Pasear al bebé, cantarle, contarle algún cuento, pedirle que converse con él, son tareas que lo harán sentir útil y de paso, creará un vínculo eterno con el recién nacido. Ahora me dirán ¡pero si el bebé a esa edad no debe entender nada. ¡Falso!

Posiblemente no “entiendan” las cosas como nosotros imaginamos, pero definitivamente  reconocerán su timbre de voz de la misma manera que lo hizo contigo al nacer y escucharte luego de esos “encuentros” en los que, en la tranquilidad de tu cuarto, tocabas tu barriguita y le contabas tus ilusiones y deseos. El olor característico del padre también será otro factor que le permitirá reconocerlo. Podemos motivar de muchas cosas al papá para que haga, pero la sonrisa del bebé al “sentirlo” cerca será más que suficiente para él.

Otra forma de apoyarnos es, de haber hijos mayores, ocuparse de ellos, hace las tareas, salir a jugar, de esta manera la mamá estará tranquila amamantando a su bebé.

El papá puede bañar al bebé, esta es una experiencia maravillosa ya que a la mayoría les encanta el agua, y seguro que van a relacionar lo divertido del baño con la presencia del papá, como diría mi hija mayor !!de lujo¡¡

Cargar al bebé es un privilegio, aunque algunos digan que los vamos a malcriar por tenerlos en brazos. !!!Disfruta!!! (que palabra tan impresionante y tan poco usada por nosotras), sí, disfruta de tu hijo pequeño, pronto crecerá y seguro te dirá: “papá, mamá,  cierren la puerta de mi cuarto quiero un poco de privacidad”. Aprovéchalos, cárgalos, mímalos, bésalos mucho, literalmente los tienes en tus manos y puedes ¡DISFRUTAR! de ellos a plenitud… el tiempo pasa volando.

Otra actividad muy “polémica” (socialmente hablando ¡plop!) es cambiar los pañales del bebé, Vamos, permítele (convénselo) que lo haga, no sabes las lindas anécdotas que tendrán para compartir en unos años y decirle a tus hijos “yo te cambié los pañales cuando eras un bebé”. Y bueno la lista puede ser muy larga y seguro que tú tienes muchas otras cosas que se te ocurrirán, así que papis a gozar de sus bebés y a las mamás a continuar con tu lactancia.

Saludos y feliz Día del Padre..

Helen 

Mamá